Páginas

lunes, 24 de octubre de 2011

23º Capitulo- Noche en casa de Carol.

Holaa! ¿Que tal chicas? Bueno no tengo mucho que deciros solo que este es el primer capitulo del maratón. Se que es un poco corto pero espero que os guste.
Seguiré subiendo como 2 o 3 capítulos por día ok?
Bueno tengo que irme, muchísimos besos mis magnificas lectoras! 


__________________________________________






NARRA JUSTIN:

Gran parte de la tarde la pasamos jugando a juegos estúpidos, hablando y haciendo bromas. Salimos a dar una vuelta por los alrededores y nos hicimos unas cuantas fotos divertidas. Me encantaba estar con mis amigos pero aun mas con (Tu nombre), de la que nunca me separaba.

Casi al finalizar la tarde volvimos a casa de Carol y, al no estar sus padres, decidimos jugar a la botella. Me parecía un juego estúpido en general pero aun más cuando a la única chica que me apetece besar es a mi preciosa novia, por las demás...  no tenia ningún interés. Ademas... ¿porque se empeñaban tanto en jugar a eso? No nos podíamos entretenerse con otra cosa? Pero al parecer no me quedaba otra... todo el mundo iba a jugar y se que si yo no lo hacía, acabarían quejándose y suplicándome.

-Venga! Girare yo la botella. -dijo Ryan mientras los demás empezábamos a colocarnos en circulo.

-A quien le tocara... a quien le tocara... -susurraba Chris, frotándose las manos con aire misterioso.

-Uff... que pesados sois. -se quejo Carol poniendo los ojos en blanco.

Ryan hizo girar la botella. Los primeros en tener que besarse fueron Jeydon y Tiffy. Y hubiera jurado que ella estaba mas emocionada de lo normal.
Los siguientes fueron Ryan y Carol y gracias a dios a (Tu nombre) le toco conmigo, no hubiera soportado verla besar a otro chico. Empezamos a besarnos, suave y lentamente, disfrutando del beso. Y yo solo podía pensar en sus labios, sus dulces labios a los que tanto amaba y a los que nunca renunciaría por nada del mundo. Eran una una droga, un veneno adictivo que hacía que me volviera loco por ella... pero al mismo tiempo una medicina, que lo curaba todo pasase lo que pasase, te hacía sentir mejor que nunca.
Antes de poder reaccionar, ya llevábamos casi 5 minutos besándonos. Las toses falsas y las risitas envolvían el ambiente haciendo que volviéramos a la tierra. Creo que si no nos hubiesen interrumpido hubiéramos seguido así durante horas.


El juego continuo y a pesar de que hubo bastantes besos mas ni a (Tu nombre) ni a mi nos toco volver a besarnos con nadie, cosa que agradecí.


NARRAS TU:


10h30 hora de ver una peli. Nos acomodamos en los sofás del salón de nuestras amiga con palomitas y golosinas, dispuestos a ver una pelicula de acción, elegida por los chicos.
Me senté junto a Justin  y le abrace mientras que él pasaba su brazo por mis hombros y me apretaba contra su cuerpo.
La película comenzó y él no apartaba la vista de mi prácticamente, yo intentaba concentrarme en las imágenes y enterarme de lo que estaba mirando pero Justin me distraía y me desconcentraba cada dos por tres. Hasta que en una ocasión, cuando alce la vista para mirarle y seguidamente sonreirle, él agacho la cabeza, mirándome fijamente a los ojos, como si intentara casi comunicarse conmigo a través de la mirada haciendo que mi corazón se desbocara incontrolablemente y me beso con decisión. Sentía sus caricias recorrer mi pelo mientras que la temperatura de nuestros cuerpos aumentaba notablemente. Nuestras lenguas se mezclaban y jugaban entre un sin fin de besos a cada cual mas delicioso.
Ya no me interesaba la película, por mi podía continuar perfectamente aunque no estuviera nisiquiera escuchándola, esta noche solo tenia ojos para Justin.

Parecía mentira que estas casi dos horas que pasamos en frente de la televisión me hubiera parecido apenas unos escasos minutos. Justin y yo no nos paramos de besar casi hasta el final de la pelicula y obviamente la mayoria de los chicos se habian dado cuenta de eso, acausa de algunas miradas picaras y divertidas que nos echaban de vez en cuando mientras recogiamos pude darme cuenta.


La mayor parte de la noche la pasamos jugando a juegos estúpidos, pasándonoslo bien y sobre todo riéndonos muchísimo. Las horas pasaban... 1,2,3,4,5,6 y sin ningún sueño, ni ganas de descansar seguíamos haciendo divirtiéndonos a mas no poder. Hasta que por fin a las 6h45 de la mañana la gente se iba quedando dormida poco a poco en el primer sitio donde se dejaban caer. 
Como ya era tarde decidí cambiarme:






Al final solo quedamos Chris, Justin y yo, que jugábamos a un nuevo juego de cartas que nos estaba intentando explicar Chris pero que nadie entendía.
Entre risas y tonterías el móvil de Justin sonó, todos nos quedamos sorprendidos... ¿quien podía llamar a estas horas? Él cogió su móvil y salio fuera del salón dejándonos solos a Chris y a mi.


-¿Que tal van las cosas con Justin? -me preguntó discretamente mientras que barajaba las cartas.


-Muy bien la verdad y mas ahora que se va a quedar durante mas tiempo en Canadá.


-Si, eso es genial! Todos estamos muy contentos. -exclamo pero seguidamente hizo una pausa mientras miraba distraído las cartas que repartía. -bueno... no creo que todos.


-¿A que te refieres? -le mire confundida.


-Jeydon... supongo que ya lo habrás notado.


En ese momento comprendí que se refería a las malas vibraciones que últimamente había entre Jeydon y mi novio.


-Siempre están últimamente picados, molestos el uno con el otro... -musito él, hablando bajito.


-Lose, y me siento mal por eso. Hace mucho tiempo que son amigos y siento que por mi culpa las cosas entre ellos van cada vez peor. -baje la mirada al suelo. Y sentí que todo lo que acababa de decir era la pura verdad... ellos estaban así por mi.


-No (Tu nombre), no es culpa tuya ni mucho menos, es algo entre ellos dos. Es culpa de los celos de Justin y de la insistencia de Jeydon. En todo caso tu lo único que haces es que no acaben discutiendo o algo peor.


-Puff... -suspiré.- Tienes razón supongo, pero aun así me gustaría que volvieran a estar como antes.


-No te preocupes. -dejo las cartas en el suelo, donde estábamos sentados. -ya veras como se arregla. Solo es algo pasajero, les conozco perfectamente.


-Eso espero. -le sonreí tiernamente.- Gracias por todo, haces que me sienta mejor siempre.


-De nada, eres como una hermana para mi, y siento que debo cuidarte. -me explico timidamente.


-Jajaja -reí.- Tu también eres como un hermano pequeño para mi.


Justin seguía fuera hablando con aquella persona que le había llamado, mientras que nosotros empezamos nuevamente a jugar a las cartas mientras le esperábamos.
Paso casi media hora hasta que el sueño me venció y me quede dormida encima del sofá, con una manta que Chris había colocado sobre mi. Y él también dormía, en el suelo, rodeado de abrigos y otras mantas.




CONTINUARA



2 comentarios: